Diario

El alma de una Mujer

En los bosques más oscuros y frondosos de vida yace el alma de una mujer. Dicen que es una guerrera, una diosa, quizás una buena arquera que combatió en una guerra milenaria. Caminando por las sendas más tétricas se puede ver su suave danza. Lleva una capa blanca, como si fuera un rayo de luna, y juguetea con las ramas mientras en su espalda aparece la espada, su fiel aliada.

Comentan que una vez protegió al pueblo con solo su presencia ante el enemigo, que hicieron que corrieran con sus caballos relinchando y con sus ojos desorbitados. Su risa entonces se hizo presente en el lugar, como una burla a tan innoble comportamiento. Ella era única, una mujer temeraria y que se hacía respetar, aunque tan sólo fuera un espectro. Su presencia es magia y muchos niños la llaman la reina de las hadas. Es en verdad una amazona y tras su muerte quedó su alma protegiendo lo único que amó.

Yo sé la verdad…

Nació con órganos masculinos, luchó durante su existencia para feminizar su cuerpo y conseguir al menos ser entendida. Murió en medio de una guerra, la llamaron al frente a luchar, y blandió su espada mientras en otras ocasiones sus flechas atravesaron a centenares. Era el mejor arquero y el mejor espadachín, si bien él era ella y con su muerte tuvo las formas que tanto deseaba. Una piel suave, unos ojos de fiera, una sonrisa alocada, unas caderas exuberantes como su busto y un rostro tan hermoso como el de un ángel. Ella que lo dio todo por su causa, que defendió a los que incluso la golpearon y que su propia madre fustigó su alma…ella…es la que protege a la naturaleza que una vez la condenó. Jamás fue entendida y poco le importó, no se doblegó y al final de sus días logró lo soñado…

Es la actitud de los fuertes…luchar por lo que se cree y quiere.

Dedicado a Miriamelle porque la desgraciada de su madre la ha expulsado del hogar familiar y que la martiriza por ser transexual femenina.