Dame tu mano y deja que te guíe
Deja que te muestre el mundo distinto que no deseas
Ese que te aterra, te hace sentir un nudo en la garganta y asfixia
Un sentimiento confuso, doloroso, placentero y único es el que nos guía
Y tú quieres perderlo, tienes pánico y lo entiendo…pero no te escondas en una fachada que no va contigo, no eres tú y terminarás dañado por completo.
Eres un lindo muñeco, incompleto y a la vez repleto de emociones, tienes en tu mirada vidriosa mentiras enclaustradas junto al tabú del sexo.
Necesitas que te mantenga en mis brazos, que te susurre que todo va bien y que jamás me soltaré de ti… a la vez te alejas, te doy terror como mi mundo y te sientes extraño.
Sin embargo, deseas volver…regresar a mí y dejar que surque tu vientre
De verdad, no hay quien te entienda
Necesitas mi amor, comprensión, cariño, devoción, palabras de aliento, susurros de noches de lujuria… si bien te aíslas, te destrozas por dentro y arrojas tu corazón al cemento para fundirlo con la contaminación de tu ciudad.
¡Maldita sea! ¿Cómo puedes ser un niño perdido? ¿Cómo? ¿Cómo un hombre tan adulto puede parecer un bebé en mis manos? No te quiero dañar, no quiero molestarte y mucho menos recriminarte…no tienes la culpa de no saber que deseas, que necesitas o que posees.
Tienes tu mente infestada con retazos de fotografías apolilladas
Te comentaron que los niños no lloran, si bien tú eres delicado
Te corrompieron el cráneo con que los niños juegan a ser soldados y las damas a ser deseadas
Olvidaste y alejaste lo que eras…ahora ante mí te desmoronas, muestras lo que eres y a la vez dices que es un juego sin pretensiones.
¿Cómo puedes ser tan egoísta? Ah, sí, lo había olvidado…en mi mundo aún eres un niño, un pequeño de tan sólo cinco años que tirita ocultando sus ojos cafés…pero en la realidad tienes dos años más que yo, aparentas casi cuatro y sin embargo no aprendes a defenderte solo.
Quiero ser tu ángel de la guarda, ese que te espía y te protege. Necesito estar a tu lado, apoyar mi mano en tu hombro y seguir siendo tu amigo…tu guía…con ello me conformo.
Tan sólo deseo que te des cuenta, que comprendas, que me pidas ayuda y salgas de una maldita vez a la luz. No importa que ames a otro, y no a mí, no te impido ser feliz…pero con alguien que realmente te llene, que no te deje vacío y no te haga perderte lo que realmente vales.
Deja que te muestre el mundo distinto que no deseas
Ese que te aterra, te hace sentir un nudo en la garganta y asfixia
Un sentimiento confuso, doloroso, placentero y único es el que nos guía
Y tú quieres perderlo, tienes pánico y lo entiendo…pero no te escondas en una fachada que no va contigo, no eres tú y terminarás dañado por completo.
Eres un lindo muñeco, incompleto y a la vez repleto de emociones, tienes en tu mirada vidriosa mentiras enclaustradas junto al tabú del sexo.
Necesitas que te mantenga en mis brazos, que te susurre que todo va bien y que jamás me soltaré de ti… a la vez te alejas, te doy terror como mi mundo y te sientes extraño.
Sin embargo, deseas volver…regresar a mí y dejar que surque tu vientre
De verdad, no hay quien te entienda
Necesitas mi amor, comprensión, cariño, devoción, palabras de aliento, susurros de noches de lujuria… si bien te aíslas, te destrozas por dentro y arrojas tu corazón al cemento para fundirlo con la contaminación de tu ciudad.
¡Maldita sea! ¿Cómo puedes ser un niño perdido? ¿Cómo? ¿Cómo un hombre tan adulto puede parecer un bebé en mis manos? No te quiero dañar, no quiero molestarte y mucho menos recriminarte…no tienes la culpa de no saber que deseas, que necesitas o que posees.
Tienes tu mente infestada con retazos de fotografías apolilladas
Te comentaron que los niños no lloran, si bien tú eres delicado
Te corrompieron el cráneo con que los niños juegan a ser soldados y las damas a ser deseadas
Olvidaste y alejaste lo que eras…ahora ante mí te desmoronas, muestras lo que eres y a la vez dices que es un juego sin pretensiones.
¿Cómo puedes ser tan egoísta? Ah, sí, lo había olvidado…en mi mundo aún eres un niño, un pequeño de tan sólo cinco años que tirita ocultando sus ojos cafés…pero en la realidad tienes dos años más que yo, aparentas casi cuatro y sin embargo no aprendes a defenderte solo.
Quiero ser tu ángel de la guarda, ese que te espía y te protege. Necesito estar a tu lado, apoyar mi mano en tu hombro y seguir siendo tu amigo…tu guía…con ello me conformo.
Tan sólo deseo que te des cuenta, que comprendas, que me pidas ayuda y salgas de una maldita vez a la luz. No importa que ames a otro, y no a mí, no te impido ser feliz…pero con alguien que realmente te llene, que no te deje vacío y no te haga perderte lo que realmente vales.
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