Quien la sigue la consigue
Quien aguanta se levanta
Quien eleva la mirada sobrevive
Mientras el peregrino siempre sigue
El amor es un sentimiento suicida
Que nos destroza y nos enclaustra
Que nos devora y nos asusta
Haciéndonos que sintamos liviana la vida
Tu corazón junto al mío
Latiendo en una nueva sinfonía
Mientras se vuelve tibio el frío
Por esta estúpida y grandiosa ironía
Dame la pasión de tus labios
Conquístame de nuevo otra vez
Deslízate entre mis brazos como un pez
Una hermosa sirena que me da la luz que irradio
La más dulce de las locuras ha comenzado
El telón mágicamente se ha alzado
Y este maldito príncipe malcriado
De tus palabras ha quedado embelesado
Deseo palpar tu cuerpo entre mis dedos
Sentir por una vez que te tengo
Y que tengo la fortuna abrazar tu cuerpo
Que no es un sueño, sino algo cierto
Mírame de nuevo, mírame y sedúceme
Conquista mi alma con una sonrisa
Y a tu vida átame
Porque soy un suicida subido a una cornisa
Soy ese loco que jamás será cuerdo
Aunque lo intente, siempre será Quijano
Continuará siendo despreocupado y terco
Pero atándose esta vez a tus manos
Eres la belleza en una realidad nefasta
Mi manantial de vida y locuras
Mi poesía y yo la rúbrica en esta carta
Donde deslumbro mi alma en medio de la bruma
Te amo, al fin puedo gritarlo
Te amo, al fin pude lograrlo
Entrar en tu corazón y abrir el sello
Para luego dulcemente besarlo
Me has dado más que felicidad
Me has llenado de una vitalidad
Esa que jamás creí volver a recuperar
y que se hizo desear a la vez que esperar
Sin embargo debo de hacerte una confesión
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