lunes, 17 de septiembre de 2007

Diario



Te amo y no te merezco.
Odio decir esto, pero debo ser sincero. Estoy cansado, tremendamente agotado de sentirme un fracaso ante tus ojos. Soy un guerrero y no sé luchar por lo poco que tengo. Eres mucho para mí y a la vez un diminuto ser que esboza una sonrisa. Desearía abrazarte, robarte carcajadas y hacer que tu mirada se llenara de locura. Eres un pequeño dios para mí, mi única oportunidad de sobrevivir. Sobrevivo gracias a tus palabras y a las fuerzas que lentamente me regalas en cada sueño. Siento que estas a mi lado aunque estés a kilómetros. Tus labios son tan cálidos cuando viajo junto a Morfeo, tus manos tan delicadas y tu sexo tan salvaje.

No merezco nada de lo que me regalas y sin embargo te imploro que no me dejes. Moriría si estuviera más de cinco minutos lejos de ti. Sé que soy inferior a ti y a tu belleza, soy consciente de esto y tú pareces obnubilado con algo que ves en mí, algo que solamente ves tú. Quisiera abrazarte, cubrirte con mis alas de demonio y mecerte entre mis brazos. Detesto ser un trapecista sobre el hilo de la vida, tan frágil y a la vez tan firme. Camino sin cesar deambulando recordando tu nombre en cualquier imagen cotidiana. Pienso en ti en cada instante y una sensación extraña recorre mi cuerpo. Me estremezco cuando leo un te amo en una carta electrónica o simplemente tu voz tras el hilo telefónico. Tus ojos cafés con toques verdes me desequilibran al igual que el aroma de tus cabellos, ese aroma que aún no he podido comprobar y que sé que es tan dulce como tus sonrisas. Tienes un encanto especial que hace que cualquiera se arrodille ante ti. Bendigo cada instante que tengo junto a ti y maldigo al espacio por dividir nuestras almas.

Deseo tocarte con las yemas de mis dedos, acariciar tu espalda y besar tu cuello. Dominar la fiera que yace tras tu armadura de muñeco perfecto. Eres la belleza hecha carne, siempre te lo he dicho. Una escultura viviente que pasea por el mundo para enloquecerme. Quisiera besar tu boca, hacerte prisionero de mis labios, y jugar a confesarte secretos con mi lengua hasta saciar mi sed de ti. Nadie apuesta por nosotros y sin embargo hemos dado todo por seguir adelante, por eso sé que algún día temblaras entre mis manos y que caminaré en tu interior. Me gustaría dominarte mientras te doy la libertad del sexo. Mi cama esta dispuesta a tenerte entre mis sábanas, es más, te espera deseosa de que tiembles sobre su colchón.

Me excitas en cada sonrisa tras una minúscula pantalla.

Me haces desearte en cada palabra.

Traes a mí la ternura cuando pides un abrazo a gritos con tu mirada.

Me enloqueces, me vuelves un idiota enamorado… a mí un guerrero que se convirtió en hielo para impedir lo que sucede ahora…lo que germina en su corazón que creía destrozado, pétreo y sin nueva oportunidad. Me has salvado.

Eres quien me da equilibrio en este maldito mundo lleno de perjuicios.

No hay comentarios:

{Iwaki and Katou} <3 [Tócame]

LA HOMOSEXUALIDAD NO ES UNA ENFERMEDAD

Di NO a la Homofobia, la peor enfermedad